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El Reino de Dios

Días atrás, un amigo de la vida, Juan, a quien mucho aprecio, me sugirió que escriba acerca del Reino de Dios, quería saber de qué se trataba. Con gusto voy a tratar de hacerlo.

Ante todo, debemos aclarar que nos vamos a referir exclusivamente al Reino del Dios que menciona La Biblia, ningún otro.

El Reino de Dios es uno de los temas centrales de toda la Biblia, especialmente en la predicación de Jesucristo.

No se trata de un lugar físico específico, sino del gobierno y la soberanía de Dios sobre todas las cosas, particularmente sobre aquellos seres humanos pensantes, que lo reconocen como Señor.

Desde el Antiguo Testamento hasta el Nuevo, el Reino de Dios, no se presenta como una utopía, sino como como una realidad presente y futura, espiritual y concreta.

Como es de imaginarse, estos temas suelen ser muy controversiales, por lo tanto, y como corresponde, trataré de concentrarme en lo que afirma la propia Biblia al respecto, todo lo demás podrá ser muy lindo pera a nadie le interesa, por lo tanto, evitaré en la medida de lo posible, de dar opiniones personales.

· Antiguo Testamento

En el Antiguo Testamento, Dios es presentado como “… el soberano sobre la creación”, Salmo 103:19, y como tal, gobierna su Reino, con justicia, poder, misericordia y soberanía.

Los profetas anunciaron que Dios establecería (a futuro) un Reino eterno a través de un descendiente de David, lo leemos Isaías 9:6-7, Daniel 7:13-14, y se refería a Jesucristo. El texto bíblico, a pesar de haberse escrito siglos antes de la venida de Jesucristo a la tierra, es claro, y anuncia visiblemente lo que sucedería en el futuro, la venida del Mesías.

· Nuevo Testamento

Para que no existieran dudas, Jesús inició su ministerio con el siguiente anuncio: “El tiempo se ha cumplido, y el Reino de Dios se ha acercado” Marcos 1:15. Refiriéndose a él mismo.

Jesús presentó el Reino no como algo lejano, sino como una realidad cumplida con su propia presencia en la tierra. Enseñó que el Reino está presente donde Dios reina, incluidas las propias personas.

· Naturaleza del Reino

Jesús también afirmó que el Reino de Dios, no es un reino terrenal. “Mi Reino no es de este mundo” Juan 18:36.

No es un reino establecido por la fuerza, sino por el amor, el perdón, la verdad y la justicia. Se trata de un Reino donde los valores del mundo se invierten: los últimos serán primeros, los humildes serán exaltados, y los que sirven serán grandes

· Parábolas del Reino

Jesús utilizó muchas parábolas para describir el Reino. En Mateo 13, lo compara con:

- Una semilla de mostaza (algo pequeño que crece y se hace grande)

- Con levadura (que transforma toda la masa)

- Con un tesoro valioso escondido.

- Con una perla de gran valor (que vale más que todo lo demás).

· Ciudadanos del Reino

Este Reino como corresponde, tiene ciudadanos. Para formar parte de él, Jesús enseñó que “es necesario nacer de nuevo”, Juan 3:3.

Se trata de un cambio profundo, donde cada persona, a partir de un determinado momento, me refiero a su encuentro personal con Dios, comienza una vida nueva, por lo tanto, dejará atrás lo pasado y será guiado diariamente por el mismo Dios. Una nueva vida.

El Sermón del Monte, Mateo 5–7, describe las características particulares de los que pertenecen al Reino, ellos serán: “pobres en espíritu, mansos, misericordiosos, limpios de corazón, pacificadores”

Cuando te encuentres en la vida con uno de estos ciudadanos, deberías reconocerlo fácilmente.

· Presente y futuro del Reino

El Reino de Dios, como ya lo afirmamos, ya está entre nosotros, "el Reino de Dios está entre ustedes", Lucas 17:21.

Comenzó a partir de la muerte y resurrección de Cristo, y su culminación será cuando Cristo regrese y establezca definitivamente su Reino Eterno… “donde no habrá más pecado, dolor ni muerte”, Apocalipsis 21:1-5.

· La misión de los ciudadanos de este reino

Los ciudadanos de este Reino, son “llamados a vivir como embajadores”, 2 Corintios 5:20, serán responsables de mostrar los valores del Reino, en el lugar donde viven.

La Iglesia, no es el Reino, solo es uno de los instrumentos por medio del cual Dios lo extiende.

Conclusión

Las escrituras bíblicas son muy claras, el Reino de Dios, es el gobierno de Dios sobre todo lo creado. En este Reino, están incluidos todos los seres humanos que libremente, en un acto personal, se rindan a Él. Jesús lo anunció y lo mostró con su vida y enseñanzas.

El Reino del Dios de La Biblia, es una realidad presente que transforma vidas y asegura un destino futuro glorioso para los que creen.

Vivir bajo el Reino del Dios de La Biblia, es reconocerlo como Señor, aceptar a Jesucristo como nuestro Salvador personal y permitir que su voluntad se consume en nuestras vidas.

Resulta ser un extenso y agradable camino, doy fe.

Juan Alberto Soraire

Un cristiano del montón